sábado, 17 de noviembre de 2007

Comunidad de Trabajo

Comenzamos nuestras reuniones de trabajo que hemos denominado Comunidad de Trabajo, ya que el propósito es, desde sus inicios, fortalecer el concepto de Comunidad.

Establecimos tres propósitos fundamentales que estaremos buscando en cada reunión de Comunidad de Trabajo:

1.- Glorificar a Dios: Los integrantes de la reunión vamos a dar un tiempo para juntos y en unidad Adorar a nuestro Dios. Salmo 99:5, Salmo 45:10-11 y Salmo 100:4-5

2.- Tiempo de Edificación en comunidad: Cada integrante es responsable de pasar un tiempo de edificación personal (devocional) pero en la reunión de Comunidad de Trabajo el énfasis es:
  • Renovar nuestro entendimiento - Romanos 12:2

  • Moldear nuestro carácter - Proverbios 27:17

  • Motivarnos a resolver conflictos - Salmo 133:1

  • Exhortarnos a continuar a la meta - Filipenses 3:14

3.- Tiempo de Planificación - Lucas 14:28-29

El propósito de este tiempo es:

  • Desarrollar agendas de trabajo y planificación del desarrollo de Comunidad Vida

  • Desarrollo de procedimientos

  • Revisión y seguimiento

  • Evaluación

El tiempo que le dediquemos a cada una de estas partes puede variar de acuerdo a la dirección del Espíritu Santo y según la necesidad del momento.

martes, 6 de noviembre de 2007

Ciclos

Dejé pasar el tiempo. Sabía que tenía que dejar un antecedente de lo que aconteció, ya que es de suma importancia y trascendencia para el fundamento de Comunidad Viva; pero se me estaba dificultando. Me preguntaba: ¿Cómo puedo dejar un dato histórico de este acontecimiento? Decidí ya no postergar más mi bitácora.

La vida está llena de ciclos. Dios lo ha dispuesto así. Un tiempo para ser niño, un tiempo para ser adolescente; un tiempo para la juventud, el noviazgo y el matrimonio; un tiempo para la paternidad, un tiempo para ser abuelo, etc.

Un ciclo ha terminado. Por 17 años estuve sirviendo a la que seguiré considerando mi iglesia, La Iglesia Evangélica San Pablo, lugar dónde en su misericordia, Dios me permitió nacer de nuevo y semana tras semana, día tras día aprender más de Él y de Su Palabra. Lugar donde conocí personas maravillosas; lugar donde mi esposa de igual manera conoció a Dios, lugar donde nos conocimos el uno al otro y lugar donde nuestra vida se unió en matrimonio.

El pasado domingo 4 de noviembre terminó ese ciclo. No es casualidad que un noviembre del año 1990 llegué por primera vez a San Pablo y un noviembre, 17 años después salga de él para ser enviado por Dios a comenzar un nuevo ciclo.

Fue un momento emotivo; como bien se me recordó, había mucha gente nueva que no me conocía, porque mi propósito nunca fue el que me reconocieran a mi, sino el que a través de mi vida reconocieran a Jesucristo. Desde el altar, donde el pastor, el Dr. Abel Mellado nos dio su bendición, recorría con la mirada a la congregación orando a Dios para que los bendijera y los hiciera prosperar en todo lo que emprendieran.

¡Gracias Señor! Gracias a mis pastores, gracias a mi iglesia.